
En la literatura fantástica, los arquetipos son patrones universales de personajes y roles narrativos que se repiten en multitud de historias. Se reconocen fácilmente y ayudan a estructurar relatos y a conectar con el lector. Los arquetipos más frecuentes en este género incluyen:
- El héroe: Protagonista destinado a realizar una misión, superar obstáculos y mostrar valores como el coraje y la justicia. Ejemplo clásico: Frodo en El Señor de los Anillos.
- El villano: Opositor principal del héroe, portador del conflicto central. Ejemplo: Sauron o Voldemort.
- El mentor/sabio: Guía experimentado que orienta al héroe, muchas veces a través de consejos o con poderes superiores. Ejemplo: Gandalf o Dumbledore.
- El explorador: Busca la aventura y lo desconocido, persiguiendo la libertad. Ejemplo: Geralt de Rivia.
- El compañero/compinche: Amigo fiel que apoya al protagonista y aporta perspectiva, humor o apoyo emocional. Ejemplo: Sam en El Señor de los Anillos.
- El cuidador/protector: Personaje altruista que asume riesgos para proteger a otros. Ejemplo: Kaladin, de El Camino de los Reyes.
- El mago/artista: Posee conocimientos o habilidades especiales que pueden cambiar el curso de la historia o inspirar a otros. Ejemplo: Merlín o inventores/druidas.
- El amante/interés romántico: Motivado primordialmente por el deseo de amar y ser correspondido. Ejemplo: Anna Karenina, aunque no pertenece al género fantástico, representa bien el patrón.
- El bufón/bromista: Aporta humor, ligereza y suele revelar verdades incómodas a través de la risa. Ejemplo: múltiples picarescos o secundarios cómicos.
- El hombre común/huérfano: Personaje que representa al lector, busca pertenencia o sencillez.
- El gobernante/líder: Busca el control y el orden en el mundo, puede ser positivo (rey justo) o negativo (tirano).
Pero centrémonos en los arquetipos presentados por Christopher Vogler y su El viaje del escritor, que a su vez está basado en El héroe de las mil caras de Campbell. Según Jung, los arquetipos son un reflejo de los diferentes aspectos de la mente humana, de tal suerte que nuestras personalidades se dividen y desdoblan en estos personajes para así participar en el juego del drama de nuestras vidas. Son personajes recurrentes que encontramos en los cuentos de hadas, leyendas y mitos. También nos serviría, como nos dice Campbell, ver cada arquetipo como una máscara que cada personaje porta en función del momento de la historia. Si te ayuda, como a mí me ayuda, puedes ver también a los diferentes personajes como los arcanos mayores de las cartas del tarot. Y es que al final todo en la vida es un viaje.
Los personajes son los siguientes:
- El héroe: El héroe, cuya raíz en griego significa proteger y servir, está directamente emparentado con la idea del sacrificio personal. Protagonista de la historia, el que emprende el viaje. Representa al lector/espectador y simboliza crecimiento, transformación y sacrificio. Su arco suele mostrar cómo pasa de la ignorancia o la debilidad al conocimiento o al dominio de sí mismo.
- El mentor: Guía o maestro del héroe. Le proporciona conocimientos, herramientas o inspiración. A menudo representa los valores más altos del mundo narrativo y puede incluso preparar al héroe para reemplazarlo.
- El guardián del umbral (Threshold Guardian): Prueba al héroe antes de que avance. Puede ser un personaje, una situación o un miedo interno. Su propósito es asegurarse de que el héroe está preparado para el desafío que le espera.
- El heraldo: Anuncia el cambio, el llamado a la aventura. Puede ser una persona, un objeto o un evento que desencadena el viaje. Su aparición altera el equilibrio del mundo del héroe y marca el inicio de su transformación.
- El cambia-pieles (Shapeshifter): Personaje ambiguo o cambiante, a menudo es el interés amoroso. Representa la duda, la traición o lo desconocido. Su imprevisibilidad añade tensión emocional y simboliza la inestabilidad del deseo o la percepción.
- La sombra: Antagonista principal o fuerza oscura. Simboliza los miedos reprimidos o el lado oscuro del héroe. En muchos casos, encarna aquello que el héroe podría convertirse si se desviara de su camino.
- El embaucador (Trickster): Aporta humor, caos o relativización. A veces desafía el orden establecido o muestra verdades incómodas. Rompe las expectativas y puede actuar como catalizador del cambio o como crítico del sistema.
- Aliados: Compañeros del héroe que le ayudan en su camino. Brindan apoyo emocional, estratégico o físico. Representan aspectos del héroe que aún no ha desarrollado por completo y ayudan a reforzar su crecimiento.
En definitiva, estos arquetipos puedes usarlos como mejor te plazca: individualmente, colectivamente, mezclados, correlativamente en el mismo personaje… Y cuídate de ellos, pues al fin y al cabo todos esos arquetipos están presentes en la propia personalidad del escritor, es decir, de ti mismo. Todos somos Kevin, Patricia o incluso la bestia en según qué momento.
Nos vemos en los sueños.
JJ Conti
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